Si no te dejan cumplir tu sueño, será porque ellos no tienen el suyo propio.

Quiero hacer mi vida feliz.. quiero sonreír, quiero pasar mi vida con el chico al que quiero..¿Es pedir demasiado? Perdona si a veces soy egoísta..pero no me conformo con verte pasar, o con mirar tus fotos.. Quiero pasar contigo los mejores momentos de mi vida, y espero que también los malos.. Pero.. ¿sabes qué es lo peor? Que todo esto, se queda en una simple  ..ILUSIÓN..

Ser un bufón no es lo que yo busco..

Estoy harta de ser el segundo plato, estoy harta de que se acuerden de mí cuando les interesa. Harta de ser el bufón del que todos se ríen, de que no tengan otro tema de conversación que el de sacarme defectos, harta de hacer todo y recibir nada. Porque ignoro a las personas que me quieren y atiendo a las que no. Porque poco a poco estoy lléndome a un lado, a un segundo plano que sólo es primero cuando me necesitan. Hasta que un día diga basta. Hasta que un día no se acuerden de mí. Luchar, luchar y luchar. Es la acción que más llevo a cabo día a día.. Pero.. ¿luchar contra qué? Luchar contra la ignorancia e injusticias que comenten conmigo, luchas por seguir en el mismo lugar que siempre, y no ser un segundo plano. Pero no sirve de nada. Luchar sin que dé frutos, irónico, ¿no? Porque desde que me estoy dando a valorar, desde que digo 'estoy aquí, soy persona, tengo sentimientos y no voy a permitir que nada ni nadie me hunda más en la mierda' me valoran menos. Cuanto más me valoro, menos me valoran. Más irónico aún. Pero supongo que esta puta vida es una ironía. Dar y no recibir. Estudiar y no aprobar, en cambio, no estudiar y sacar la nota más alta. Estar despierta y soñar, intentar dormir y sólo lograr hacerlo a medias. Trabajar más horas y cobrar menos. Esta vida es una ironía, hasta que llegue el día que llegue una persona que sepa descifrar esa ironía y enseñarme a ser feliz con los pequeños detalles. Esa persona que sepa valorarte y protegerte como nadie lo había hecho. Pero hasta ese momento, tendré que seguir aguantando todas estas gilipolleces, todas estas ironías. Tendré que seguir aguantando esta puta vida irónica.

(NOT) TO EXIST.

Estás hecho del mismo material que los sueños. 

Por eso, en realidad, ni siquiera existes.

Aún te queda mucho tiempo para hacer de ti, lo que de verdad quieres ser.

Hoy de nuevo te digo adiós, otra vez, como tantas veces antes. Como tantas lágrimas derramadas anteriormente, y también te pido perdón. Perdón por haberte recordado más de lo que tú me recordaste, por haberte querido mucho más de lo que tu decidiste quererme. Te pido perdón anticipadamente por si, de ahora en adelante te echo de menos alguna vez, perdón, te aseguro que no lo haré con mala intención. 

Tiempo al tiempo.

No sabes como te sientes, ¿Verdad? Lo quieres, no te quiere, o al menos eso dice, aunque no lo demuestra. Te ilusiona para desilusionarte, te sonríe para hacerte llorar, te llama para que gastes aliento inútilmente y te besa pensando en ella. Estás locamente enamorada. Intentas olvidarlo, no puedes. No puedes porque él te lo impide. Es como.. um.. como el perro del hortelano, no come ni deja comer. No te quiere ni te deja que lo olvides. ¿En qué quedamos? ¿Te quiere o no? Deshojas margaritas, y unas veces te dicen que te quiere, y otras que no. Buscas la respuesta mirando el cielo en las noches estrelladas, pero las estrellas prefieren callarse, y esconderse. Estás harta no, lo siguiente. Te preguntas para qué hace todas esas gilipolleces. Para él es un acto, para tí un mundo. Pero no te das cuenta de una cosa; estáis locamente enamorados, los dos. Sí, los dos. Tú de él, y él de otra. Te hace todo esto para no perderte, para asegurarse de que siempre habrá alguien que lo quiera. Ella no quiere saber nada de él, y él no quiere saber nada de ti, pero te amarra, te aprieta y te ahoga en lágrimas. Pobre enamorada, pobre ilusa.